La primera infancia es un periodo de vida con características propias, donde se consolidan los primeros aprendizajes, el desarrollo psicoevolutivo y donde se sientan las bases de los conocimientos.
Durante estos primeros años se produce el desarrollo integral del alumnado, atendiendo a las diferentes áreas del desarrollo: físico, motor, cognitivo, social-afectivo y lingüístico. Además, en estos primeros momentos se encuentran en constante cambio, debido a la plasticidad neuronal que presentan, por lo que es el momento indicado para estimularles.
Ya autores como Piaget, Ausubel o Vygotsky estudiaron las características psicopedagógicas de los alumnos y alumnas a estas edades, así como su manera de evolucionar durante los primeros años, teniendo en cuenta que cada niño seguirá un ritmo de desarrollo diferente, dependiendo de los factores a los que esté expuesto: alimentación, salud, afectividad recibida, estimulación, factores genéticos, la propia maduración del sistema nervioso central, etc.
Os añado a continuación una síntesis de estas áreas de desarrollo, que debemos de potenciar tanto desde la familia como desde la escuela. ¿Os gustaría conocer actividades para potenciar cada área? ¡Escribidme en comentarios!
Espero que os haya servido de ayuda 🙂